Nuevo León.-A pesar de que el Gobierno del Estado, a través de la Secretaría de Movilidad y Planeación Urbana, negó que esté por implementarse un ajuste tarifario para pasar de $15 a $20 pesos, la organización civil Alianza de Usuarios del Transporte Público realizó una protesta en las oficinas de dicha dependencia en donde se realizaba una reunión a puerta cerrada para analizar posibles modificaciones al cobro de pasaje aplicables en el transcurso del siguiente año.
Allí, los manifestantes lograron ingresar al recinto. Primero entró la diputada local local de Movimiento Ciudadano Rocío Montalvo, como representante del Congreso Local, y minutos después, a gritos, entraron sus acompañantes y miembros de la organización.
En la sala de acuerdos dentro del Centro de Gestión de Movilidad en el Parque Fundidora, la reunión fue interrumpida por el escándalo de los manifestantes.
Con un altavoz y con pancartas, el contingente repudió la pretendida alza en las tarifas.
"¡No al tarifazo, no al tarifazo!”, gritaron y retumbó por espacio de 15 minutos a un costado de la sesión.
"Vamos a gritar bien fuerte para que nos escuchen, el pueblo unido jamás será vencido, no al tarifazo”.
Y de modo pacífico, pero molestos, estuvieron a punto de atravesar la puerta de vidrio para entrar al área específica donde están sentados los funcionarios y empresarios, en la reunión que inició al filo de las 10:30 horas.
En ella, la Comisión de Tarifas del Instituto de Movilidad y Accesibilidad (IMA) analiza proponer a la Junta de Gobierno del mismo instituto un aumento a las tarifas para que el pago en efectivo o de castigo, que es de 15 suba a 20 pesos; la ordinaria, que es de 13 suba a 17, y la preferencial, que es de 9.50 suba a 10 pesos.
La Junta de Gobierno tendría que aprobar o rechazar la medida.
En esa Junta hacen mayoría el gobernador, el secretario de gobierno, el tesorero estatal, el secretario de Movilidad, el secretario de Medio Ambiente, el director del Metro, cuatro alcaldes, y el director del IMA, junto con empresarios del transporte y representantes de sindicatos como la CTM y la CROC.
Aunque deberían estar tres alcaldes metropolitanos y uno de la zona periférica, ninguno acudió.
Los hijos de Zapata